El Mito que impide que las mujeres tomen el control de sus finanzas es: Alguien se encargara de mí, ese alguien siendo su esposo, padre, hermano, etc.

Y esto es claro, es una posición que se enseña desde la casa, y rara es la familia donde se discuten temas financieros en la sobremesa.

Psicológicamente las mujeres somos diferentes, algunas consideran el dinero como algo ‘sucio’ y no apropiado. Una idea que difícilmente ayuda.

El pensar que alguien más se encargara del dinero, mientras yo hago mi parte en una relación es una receta muy clara para perder dinero y oportunidades.

No quiero entrar en muchos detalles, pero la cantidad de dinero que se va en relaciones fallidas, es inmensa. La epidemia de divorcios hace que la institución del matrimonio ya esté casi en el 50% de fracaso. Y para aumentar el insulto, en un divorcio se estima que el nivel de vida de la mujer descenderá un 25%, mientras que el del esposo subirá un 35%. Algunos autores como Ken Dytchwald, citan que si el divorcio ocurre cuando la mujer es mayor, su nivel de vida bajara un 73% y el de el subirá un 42%. No parece justo,¿ verdad?

Mis favoritas son las esposas que le dicen a sus esposos que NO se compren un seguro de vida porque quieren una nueva camioneta (que por supuesto compraran a crédito). Y yo me quedo pensando, que ¿no se les ocurrirá pensar en que si él se muere se quedarán en la calle? Obvio no, porque no tienen idea de finanzas personales.

Una de las primeras personas que me toco visitar como asesor, era una mujer divorciada, clase media. Súper tensa, con 3 hijos de menos de 10 años. El esposo no le pagaba ya la manutención, ella no sabia hacer nada, y ahora le quería quitar la casa (cometió el error de tenerla a nombre de el). Si estás en economía de supervivencia, no vas a pensar en hacer ahorros, ¿verdad? ¿Que oportunidad tenia o tendrá  de defenderse en esas circunstancias?

Si tú crees que alguien se ocupara de tu dinero y no te ocupas de aprender del tema, pueden pasar varias cosas, buenas y malas. Si te toca una mala experiencia, el daño es real. Si todo va bien, te privas de aportar nuevas ideas, involucrarte en lograr tus objetivos como pareja e individuo. Involucrarte en temas como el presupuesto y cuidarlo, harán una gran diferencia en cuanto a los recursos con los que cuenta tu familia y los objetivos que realizan.